Un informe del Foro Economico Mundial determina los riesgos de seguridad informática que están por venir
La ciberseguridad es un tema cada vez más importante en la era digital en la que vivimos y se espera que siga siendo crucial en el futuro. A medida que más empresas, organizaciones y gobiernos se vuelven dependientes de la tecnología para almacenar información y realizar operaciones, la necesidad de proteger esta información se vuelve aún más crítica.
En el futuro, se espera que la ciberseguridad se vuelva más avanzada y sofisticada. Las tecnologías emergentes, como la inteligencia artificial, la nube y el Internet de las cosas (IoT), presentarán nuevos desafíos en términos de seguridad cibernética.
Además, se espera que las regulaciones y leyes sobre la ciberseguridad se vuelvan más estrictas en el futuro. Los gobiernos y las organizaciones de todo el mundo están tomando medidas para mejorar la protección de los datos personales y la privacidad en línea, y se espera que esta tendencia continúe.
El informe sobre riesgos del Foro Económico Mundial (WEF) expresa inquietud acerca de un mundo que se está volviendo cada vez más fragmentado, altamente conectado e impredecible.
Respecto a la ciberseguridad futura, el informe señala los riesgos de seguridad informática que se describen a continuación:
- El delito cibernético es considerado como un enemigo tanto para el público como para el sector privado. De acuerdo con un informe, a corto plazo, es decir, hasta el 2025, la ciberseguridad, la delincuencia digital y la ciberinseguridad en general tendrán un mayor impacto que otros peligros como la crisis de los recursos naturales como el agua, o de los energéticos como el petróleo. Aunque los riesgos cibernéticos son una preocupación tanto para el sector privado como para el público, el sector privado los sitúa en cuarto lugar de importancia, mientras que el sector público los considera como el noveno riesgo más importante.
- El principal objetivo de los ciberataques serán las infraestructuras críticas, es decir, aquellas que son vitales para el funcionamiento de una sociedad. Los sectores que se verán más afectados son el de la salud, banca, energía, agricultura y recursos hídricos, así como el de transporte y las telecomunicaciones, que estarán en el punto de mira de los ataques cibernéticos.
- Existe una preocupación creciente acerca de la privacidad personal debido al avance de tecnologías como el Internet de las Cosas (IoT) y la inteligencia artificial (IA). Estos avances tecnológicos han llevado al aumento del uso de dispositivos y servicios que recopilan información personal. Empresas y gobiernos que recopilan grandes cantidades de datos obtienen una ventaja competitiva. Aunque oficialmente los datos se utilizan para mejorar los servicios al usuario, su gestión inadecuada puede poner en peligro la privacidad personal.
- El «ransomware» es una amenaza cada vez más relevante y se está consolidando como un servicio que permite a atacantes sin habilidades técnicas realizar secuestros de información y otros tipos de ciberataques. Los avances tecnológicos actuales en inteligencia artificial, Internet de las cosas (IoT) y los esperados en campos como la computación cuántica y la biotecnología ofrecen nuevas oportunidades, pero también exponen a los usuarios a nuevas amenazas y delitos cibernéticos.
- El progreso tecnológico podría agravar aún más la brecha digital existente entre economías ricas y pobres. Mientras algunos países serán capaces de encontrar soluciones a crisis alimentarias, ecológicas o sanitarias gracias al desarrollo tecnológico, otros países verán aumentar sus desigualdades y conflictos.