La palabra crisis, en chino, significa oportunidad. También se suele decir que la crisis agudiza el ingenio, por lo que no es descabellado encontrar en estos tiempos personas que eligen su propia aventura y arrancan su propia actividad emprendedora.
Tomar la decisión es lo más difícil. Una vez se ha hecho, a lo largo de este artículo, te vamos a enseñar cómo elegir un nombre de dominio adecuado y pequeñas pistas para poder hacerte una idea sobre qué pasos tienes que dar una vez hayas tomado la importante decisión de emprender.
- Alta en autónomos, registro de marca y creación de sociedad. Los temas administrativos seguramente son los menos inspiradores o estimulantes, pero son condición sine qua non. El registro de marca o la creación de sociedad son pasos que se pueden dar más adelante, una vez se haya iniciado y valorado si la marca funciona y si compensa la creación de sociedad. Sin embargo, el alta en autónomos y el registro de la actividad es fundamental. Muchos ayuntamientos ofrecen asesoramiento gratuito e incluso se ocupan de todo el papeleo. Infórmate si el tuyo también.
- Producto o servicio que se ofrece. Este aspecto está relacionado con la idea de negocio que ha sido la que ha movilizado a la persona a emprender. Exige una reflexión profunda y conviene marcarse una serie de objetivos para saber si las cosas están yendo de la manera esperada o si se ha encontrado otro camino por el que seguir.
- Página web. Si bien hace unos años esto era secundario, hoy por hoy se ha convertido en fundamental. Se trata de una suerte de tarjeta de visita, por lo que el dominio debe ser acorde con lo que se vende, fácil de recordar, corto y no contener muchas vocales que compliquen su pronunciación.
- Google es tu amigo. Google es el oráculo de cualquier cosa, por lo que será – casi seguro – a lo que recurrirá tu cliente potencial medio. Elaborar bien los textos de la web utilizando palabras clave es importante para que el buscador te posicione cuanto más arriba de manera natural, mejor. Por otro lado, también puedes recurrir a Google Adwords y elaborar tu propio anuncio, si bien la estrategia de publicidad no se suele armar hasta que no pase un tiempo, se sepa bien dónde se encuentra el cliente, ya que se habrá perfilado más.
- Cuéntaselo a todos. En el mundo digital todavía funciona el boca a boca o el boca – oreja. Cuéntale a todos tus contactos que has emprendido y a qué te estás dedicando para que lo tengan en cuenta. Los círculos sociales son unos buenos embajadores de marca y ayudan a traer clientes.
- Sé paciente. Nadie dijo que emprender fuese fácil. Aunque tengas tus objetivos, tu cliente definido y vayas a donde él está, ya sea a través de Google o a través de acciones comerciales directas, puede ser que las cosas no salgan como habías planeado. No desesperes, date tiempo y revisa y analiza qué es lo que estás haciendo, quizá, simplemente, debas replantearte la forma de dirigirte al cliente o ensalzar determinadas características de tu producto. Los resultados son fruto del trabajo.