En un mundo cada vez más conectado, la seguridad en Internet se ha convertido en una preocupación fundamental. Con el avance de la tecnología, la amplia oferta de servicios de Internet y la gran cantidad de información personal que compartimos a través de medios digitales, es crucial garantizar la seguridad de nuestra conexión.

Sin embargo, no todas las redes ofrecen el mismo nivel de seguridad, lo que nos lleva a buscar proveedores confiables y adoptar medidas preventivas para salvaguardarnos. Por ello, en este artículo analizaremos los factores más relevantes a tener en consideración al momento de blindar nuestra red de internet, así como algunos consejos de acción por parte de los usuarios.  

Características de una red segura

Es fundamental destacar que no todas las redes de Internet ofrecen el mismo nivel de seguridad, ya que esto depende de diversas características, como el proveedor del servicio, las tecnologías de seguridad utilizadas y las acciones tomadas por los usuarios.

Por lo que con la amplia oferta de paquetes de Internet y el rápido avance tecnológico, puede resultar desafiante encontrar un proveedor de servicios de Internet que ofrezca las mejores características de seguridad. Una forma sencilla de lograrlo es mediante el uso de un comparador de Internet confiable que brinde asesoramiento gratuito. Sin embargo, si deseamos identificar por nuestra cuenta las características de una red segura, debemos prestar atención a los siguientes factores:

• Conexión encriptada: es imprescindible que la red permita establecer una conexión cifrada mediante el uso de protocolos de seguridad como HTTPS (HyperText Transfer Protocol Secure). Esto asegura que la información transmitida esté protegida y no pueda ser interceptada o alterada por terceros.
• Procesos de verificación seguros: la red debe disponer de un mecanismo sólido de autenticación para verificar la identidad de los usuarios, esto puede incluir contraseñas seguras, autenticación de dos factores u otros métodos de verificación de identidad confiables.
• Uso de Firewall: una red protegida requiere de un firewall que controle y supervise el tráfico. Asimismo, se deben implementar sistemas de filtrado de contenido para bloquear el acceso a sitios web maliciosos o inseguros, lo que ayuda a reducir el riesgo de exposición a amenazas cibernéticas.
• Actualizaciones constantes: las actualizaciones periódicas de seguridad son indispensables para corregir vulnerabilidades conocidas y protegerse contra las últimas amenazas. Esto implica mantener actualizados los sistemas operativos, las aplicaciones y cualquier software de seguridad utilizado.
• Anti malware: es importante contar con medidas de protección contra malware, que es cualquier programa o código diseñado para dañar, infectar o comprometer un dispositivo sin el consentimiento del usuario. Para ello, se recomienda usar antivirus y programas antimalware que detecten y prevengan la presencia de software malicioso.s.
• Protección de redes de internet inalámbrico: al emplear una red inalámbrica, es crucial que esté protegida con el cifrado más seguro posible, como WPA2 (Wi-Fi Protected Access 2). Además, se deben seguir buenas prácticas, como emplear contraseñas seguras y únicas, así como desactivar funciones innecesarias como la transmisión del nombre de la red (SSID) o el acceso de dispositivos no autorizados. Esto contribuye a garantizar la seguridad de la red inalámbrica y proteger cualquier operación que se realice a través de ellas.

Cómo proteger tu seguridad en línea

Al mismo tiempo, las acciones de los usuarios desempeñan un papel crucial en la seguridad de una red. De hecho, las malas prácticas representan la principal amenaza en ciberseguridad, ya que las personas pueden cometer errores que resulten en vulnerabilidades en la red. Por lo tanto, es importante tener en consideración las siguientes pautas para minimizar cualquier riesgo al máximo:

• Contraseñas adecuadas: para crear una contraseña segura, se recomienda evitar el uso de información personal obvia, combinar números, letras y caracteres especiales, asegurarse de que sea única y cambiarla regularmente.
• Autenticación en dos factores: se recomienda habilitar la autenticación de dos factores (2FA) siempre que sea posible, ya que agrega una capa adicional de seguridad al requerir una segunda forma de verificación, como un código enviado a través del teléfono móvil, además de la contraseña.
• Evitar wifi publico: las redes Wi-Fi públicas, pueden ser inseguras y vulnerables a ataques de hackers. Sin embargo, en caso de que no haya otra alternativa, es aconsejable utilizar una red privada virtual (VPN) o una conexión de datos móviles segura para acceder a Internet. Esto ayuda a proteger tus comunicaciones y datos personales de posibles amenazas.
• Monitoreo constante: es importante monitorear regularmente las distintas cuentas que manejemos para detectar cualquier actividad inusual o no autorizada. De esta forma, si identificamos cualquier movimiento sospechoso, debemos proceder a cambiar las contraseñas y comunicarnos con la institución responsable para reportarlo y tomar las medidas necesarias. El monitoreo constante ayuda a detectar y mitigar cualquier intento de fraude o actividad, especialmente cuando se trata de cuentas con carácter financiero.
• No compartir información delicada: es crucial no compartir información confidencial, como números de tarjetas de crédito, cuentas bancarias y contraseñas, a través de medios inseguros, como correos electrónicos o mensajes no cifrados.
• Mantenerse actualizado: por último, es crucial mantenerse informado sobre las prácticas de seguridad en línea más recientes. Mantente al día con los riesgos y las medidas de protección mediante la participación en cursos de seguridad cibernética o la búsqueda de información confiable de fuentes reconocidas. Al educarte sobre estas cuestiones, estarás mejor preparado para proteger tus datos y reducir los riesgos de seguridad en línea.

Siguiendo estos consejos y prestando atención a las características de nuestra red, podremos aumentar significativamente la sensación de seguridad al operar en línea. De esta manera, podremos disfrutar de las comodidades que ofrecen los servicios digitales con mayor tranquilidad.