Los ciberseguros son un producto de demanda creciente, sobre todo en el sector tecnológico
La demanda cada vez es mayor debido a los riesgos cibernéticos y los ciberataques, los cuales tienen como objetivo atacar a cualquier tipo de empresa, independientemente de su tamaño, relevancia o sector.
Las coberturas a parte de ser legales o económicas, también son técnicas. Estas son algunas:
- Coberturas de Responsabilidad Civil a terceros
- Responsabilidad por pérdida de datos de carácter personal o riesgos de privacidad a los titulares de los datos y a terceros interesados
- Cobertura contra las reclamaciones por la violación de derechos de propiedad intelectual relativos a cualquier tipo de contenidos
- Defensa jurídica y asistencia a juicio
- Protección frente a reclamaciones de terceros por incumplimiento en casos de custodia de datos, difamación en medios corporativos o infección por malware
- Cobertura de pérdida de beneficios
- Cobertura de pérdidas de ingresos netos
- Cobertura para los datos alojados en la nube
- Gastos de gestión y comunicación de crisis
- Asistencia técnica y gastos de investigación del siniestro
- Gastos de reparación y restauración de los datos borrados y de los equipos dañados
- Asistencia técnica frente a una intrusión de terceros en los sistemas informáticos del asegurado
- Gastos por errores tecnológicos y omisiones
Las ciberpólizas contemplan unas garantías básicas y otras opcionales. Cada contrato es diferente en función de los activos, el tamaño de la empresa, el nivel de exposición digital, el volumen de datos a salvaguardar o el nivel de seguridad del tomador. Pero los que cubren una amplia gama de riesgos que se pueden englobar en dos grandes grupos.
En primer lugar, los daños propios. Son los que surgen de la pérdida de ingresos como consecuencia de una vulneración de seguridad o de un ataque de denegación de servicio. Los ciberriesgos que cubren son:
- La cobertura para los datos alojados en la nube
- Gastos de gestión y comunicación de la crisis
- Asistencia técnica y gastos de investigación del siniestro
- Gastos de reparación y restauración de los datos borrados y de los equipos dañados
- Pago de rescates
- Defensa jurídica y protección contra multas o sanciones de organismos reguladores
Y, por otro lado, los daños de terceros, que los ciberriesgos que cubren son:
- Coberturas de responsabilidad civil por pérdida de datos de carácter personal
- Gastos de notificiación de vulneraciones de privacidad a los dueños de los registros o a terceros que estén interesados
- Protección frente a reclamaciones de terceros por incumplimiento en casos de custodia de datos, difamación en medios corporativos o infección por malware
- Cobertura de delitos cibernéticos, como estafas de phishing, hacking telefónico, fraude electrónico, o extorsión cibernética
Por último, además, algunas coberturas ofrecen servicios extras como: la adecuación personalizada a la LOPD; medidas de prevención como análisis externo e interno de las redes informáticas del cliente; o la línea de atención telefónica a través de la web.
Al tener una variación tan amplia de diferentes tipos de ciberseguros es recomendable leer con detenimiento las pólizas con sus condiciones y exclusiones antes de contratarlo, para no llevarnos sorpresas y saber de antemano cómo tenemos que proceder en caso de que ocurra cualquier incidente.
Para profundizar más sobre las diferentes coberturas y mucho más sobre el mundo de los ciberseguros asiste al primer congreso nacional del ciberseguro, Cyber-Insurance Day 2020. Te esperamos el próximo 18 de junio a nuestro evento virtual y gratuito, presentado por CyberSecurity News.
