¿Pueden ser «hackeados» un coche, un tren, un avión, un satélite, pero también una compañía, gobierno o un ejército? ¿Pueden ellos también ser víctimas de un ciberataque? ¿Pueden ser secuestrados o paralizados? Thales responde a todas las preguntas.
Entonces, ¿podrían estas entidades protegerse contra tales ataques? ¿Y cómo? Estas fueron algunas de las preguntas que Thales quería responder con motivo de su primer Media Day organizado en París.
¿Por qué se otorga esta prioridad a la ciberseguridad? Por una razón simple y casi obvia: la ciberseguridad es la condición sine qua non para nuestro bienestar personal, el buen funcionamiento de nuestra vida cotidiana. En términos más generales, es la base de nuestra tranquilidad colectiva en nuestras actividades personales y profesionales.
Nuestro bienestar bajo la amenaza de la ciberseguridad
Tomemos un ejemplo concreto. Por la mañana, muchos de nosotros, por lo general temprano, echamos un vistazo a nuestro smartphone. Leemos nuestras interacciones en redes sociales, revisamos nuestros medios favoritos, comprobamos el tiempo que hará hoy o respondemos a los mensajes recibidos durante la noche de ese amigo o familiar que vive al otro lado del mundo.
Un poco más tarde, usamos el GPS de nuestro coche casi sin darnos cuenta. Luego, durante todo el día, operamos herramientas de trabajo, pequeñas o grandes, todas conectadas a Internet. Y finalmente regresamos a nuestro hogar, cada vez más equipado con objetos conectados, desde la televisión hasta el frigorífico y la iluminación de las habitaciones.
Ni por un momento hemos pensado en la creciente conectividad que nos rodea y que condiciona nuestro bienestar diario. ¿O hemos considerado que, debido a su conectividad con la web, está bajo constante amenaza de ciberataques cada vez más experimentados, que están en condiciones de obtener enormes beneficios económicos y/o estratégicos al alterar los sistemas económicos y políticos en los que evolucionamos?
De ahí el estado de asombro, parálisis y pánico en el que los empleados de compañías y administraciones de todo el mundo se encontraron durante días en mayo de 2017, víctimas del ataque de ransomware “WannaCry”.
Un abanico de opciones de ciberseguridad para protegernos
La magnitud de esta amenaza, que obviamente excede las capacidades de las protecciones más básicas y crece al mismo ritmo que la transformación digital del mundo, es la razón por la cual Thales ha desarrollado un conjunto de soluciones y servicios de ciberseguridad que ofrecen un nivel único de protección, comprensión de la amenaza y capacidad de respuesta. En combinación con las tecnologías de inteligencia artificial y big data in-house, estas soluciones de ciberseguridad pueden controlar volúmenes de datos cada vez más masivos en tiempo real y detectar ataques de amenazas conocidas pero también desconocidos debido al análisis anómalo e inusual de patrones de comportamiento.
El trabajo en Ciberseguridad de Thales
A continuación os dejamos algunos ejemplos anunciados este año por parte de la compañía Thales en materia de ciberseguridad:
- El nuevo Cyberlab en Bélgica se utiliza para replicar las redes y sistemas IT de clientes empresariales y gobiernos de la forma más realista posible, para probar su resistencia a las últimas formas de ciberataque.
- La sonda del sensor Cybels está diseñada para detectar ciberataques en todos los tipos de sistemas informáticos. Sus algoritmos usan inteligencia artificial para detectar ataques de día cero y mejorar continuamente sus capacidades de detección.
- CipherTrust Cloud Key Manager simplifica la administración de claves de cifrado. A través de una interfaz web fácil de usar, las organizaciones pueden mantener el control de su estado en la nube.
- El sistema operativo PikeOS permite la construcción de dispositivos inteligentes para Internet de las cosas, todo de acuerdo con los estándares de calidad y seguridad de su industria.
- El ATCyber proporciona una gama de actividades, desde protección hasta defensa activa. Ofrece soluciones eficientes a los proveedores de servicios de navegación aérea para prevenir, administrar y reducir el riesgo cibernético.
Todas estas soluciones se basan en el enfoque triple A de Thales (Activo, Adaptable, Constante Aprendizaje). Permiten que los sistemas conectados establecidos por las empresas y los gobiernos sean «seguros por diseño». Se enfrentan a atacantes potenciales con una capacidad defensiva, no solo para repelerlos sino para disuadirlos.
Como explica Patrice Caine, CEO de Thales, «el mundo del mañana, en el que la tecnología mejorará constantemente nuestro bienestar, solo funcionará si conseguimos que nadie entra a piratear el sistema».