Sophos, empresa de soluciones de seguridad innovadoras que derrotan a los ciberataques, publica los resultados de su informe anual sobre el sector educativo, «The State of Ransomware in Education 2024». Según el informe, el pago medio por un rescate es de 6.6 millones de dólares en el caso de la educación primaria, y de 4,4 millones de dólares en las instituciones de educación superior. Además, la encuesta revela que el 55% de los encuestados en enseñanza primaria y el 67% de los encuestados en enseñanza superior pagaron más que el rescate inicial solicitado.
Los ataques de ransomware están causando más de un estrago, ya que solo el 30% de las víctimas de ransomware encuestadas en ambos niveles fueron capaces de recuperarse por completo en una semana o menos, por debajo del 33% (educación primaria) y el 40% (educación superior) del año pasado. Esta disminución en la tasa de recuperación se debe probablemente a que las instituciones educativas trabajan con equipos y recursos limitados, lo que dificulta la coordinación de los esfuerzos de recuperación.
«Desgraciadamente, las escuelas, universidades y otras instituciones educativas son objetivos que tienen una responsabilidad con los municipios, las comunidades y los propios estudiantes, lo que intrínsecamente crea situaciones de gran presión si se ven afectadas y desestabilizadas por el ransomware. Las instituciones educativas sienten la responsabilidad de permanecer abiertas y seguir prestando sus servicios a sus comunidades. Estos dos factores podrían estar contribuyendo a que las víctimas sientan tanta presión para pagar», afirma Chester Wisniewski, director y Field CTO de Sophos.
Los ciberdelincuentes aumentan la presión por cobrar comprometiendo las copias de seguridad
«También sabemos que los atacantes de ransomware han aumentado la presión a la hora de cobrar. Comprometer las copias de seguridad de sus víctimas es ahora un elemento habitual de los ataques de ransomware, lo que da a los adversarios la oportunidad de aumentar después la petición de rescate cuando está claro que los datos no se pueden recuperar sin la clave de descifrado.»
De hecho, el 95% de los encuestados afirmaron que los ciberdelincuentes intentaron poner en peligro sus copias de seguridad durante el ataque, y el 71% de ellos lo consiguieron, lo que supone la segunda tasa más alta de compromiso de copias de seguridad de todos los sectores analizados. El hecho de que las copias de seguridad se vean comprometidas también incrementa considerablemente los costes de recuperación, multiplicando por cinco la factura total en la educación primaria y por cuatro en la educación superior.
Menos ataques, pero más dañinos: aumenta el cifrado y robo de datos
A pesar de las dificultades para hacer frente al ransomware, la tasa global de ataques ha descendido respecto al año pasado. El 63% de las instituciones de educación primaria y el 66% de las de educación superior han sufrido ataques de ransomware, frente al 80% y el 79%, respectivamente. Al mismo tiempo, la tasa de cifrado de datos ha aumentado ligeramente, con un 85% de los ataques en educación primaria y un 77% de los ataques en educación superior incluyendo el cifrado de datos, ligeramente por encima del 81% y el 73%, respectivamente, registrados en el estudio de 2023. Por desgracia, los ciberdelincuentes no solo están cifrando datos, sino que también los están robando, utilizándolos como chantaje para monetizar aún más el ataque. Al 22% de las instituciones educativas de primaria que sufrieron el cifrado de datos, también les robaron los datos, junto con el 18% en la educación superior.
La encuesta revela también que las vulnerabilidades explotadas son el origen principal de los ataques en el sector educativo, proporcionando a los ciberdelincuentes una vía de acceso a la red en el 44% de los ataques de ransomware contra la educación primaria y en el 42% en la educación superior.
¿Cómo puede protegerse el sector educativo?
En base a esta encuesta de Sophos, las escuelas y otras instituciones educativas podrían obtener grandes beneficios respecto a su ciberprotección si contaran con un enfoque de seguridad por capas que incluya escaneo de vulnerabilidades y orientación sobre cómo priorizar los parches para reducir su superficie de ataque, así como protección de dispositivos y endpoints con funciones antiransomware, que detecten y detengan automáticamente los ataques. Además, contar con servicios de detección y respuesta gestionados (MDR), supervisados y dirigidos por humanos las 24 horas del día, los 7 días de la semana, les ayudaría a neutralizar los ataques avanzados, aprovechando la telemetría de las soluciones de copia de seguridad para detectar y detener a los adversarios antes de que puedan causar daños.
«Aunque parece haber algunos avances positivos en la lucha contra el ransomware en el sector educativo, es preocupante que la tasa de cifrado de datos siga aumentando año tras año, lo que sugiere que las instituciones educativas deben seguir trabajando para mejorar su resistencia al ransomware. Con recursos limitados y presupuestos limitados, las organizaciones educativas necesitan enfocarse en aquellos controles que les repercutirán mayor impacto. Con el coste medio de recuperación de ransomware para el sector educativo alcanzando ahora los 3 millones de dólares, está claro que invertir en una solución de prevención y protección potente puede reducir considerablemente el impacto financiero general de la ciberdelincuencia en las instituciones educativas», comenta Wisniewski.
El papel de los organismos policiales y/o gubernamentales de seguridad
El informe de Sophos de este año incorpora una nueva área de estudio: información sobre el papel de las fuerzas de seguridad en la reparación del ransomware en el sector educativo. El 99% de los centros de educación primaria y el 98% de los de educación superior se pusieron en contacto con los organismos policiales y/o gubernamentales oficiales tras un ataque de ransomware. Como resultado, el 64% de las instituciones de educación primaria y el 66% de las de educación superior se beneficiaron de asesoramiento sobre cómo hacer frente al ataque. El 61% de las organizaciones de educación primaria y superior recibieron ayuda y apoyo para investigar el ataque, y casi el 49% de las de educación primaria y el 48% de las superior solicitaron ayuda a los organismos de seguridad para recuperar los datos cifrados en el ataque.