¿Cuánto puede costar a una empresa el error de un directivo? Hiscox pone precio máximo a un gasto de defensa en un siniestro de su póliza Hiscox D&O
Para que una empresa funcione de forma óptima, todos sus trabajadores deben estar en sincronía. No obstante, nadie es perfecto y, bien un trabajador normal o un directivo puede provocar una situación que genere pérdidas económicas. Casos como estos se dan muchas veces, siendo algunos de ellos de una cantidad exorbitada. Por suerte, para estas situaciones existen productos destinados a paliar el fallo cometido por el profesional. Hiscox, aseguradora especializada en empresas y profesionales en el mercado español, ha publicado un informe en el que repasa los errores más comunes. Además, en dicho informe cuantifica el coste económico de cada uno de ellos. El mayor importe por gastos de defensa en un siniestro de su póliza Hiscox D&O alcanzó los 215.000 euros. A continuación vamos a tratar algunos de los errores que se comente y su coste. ¿Cuánto puede costar a una empresa el error de un directivo?
Estas coberturas están referidas a gastos de representación legal y defensa, gastos de crisis y restitución de la imagen, etc. David Heras, director general de Hiscox Iberia, comenta sobre el producto que ofrece: -«En Hiscox nos dimos cuenta que era posible ofrecer un seguro con garantía a las pymes españolas y, más importante que eso, que era necesario que existiera. Los seguros D&O son cada día más importantes y los riesgos asociados no entienden de tamaños de empresa ni del sector al que se dedican. Los seguros no sólo ayudan a mitigar el impacto de una demanda cuando se produce por un error en su gestión, sino que también ayudan a recuperar la normalidad con servicios añadidos como el de gestión de crisis de imagen. Es un servicio integral y una protección no sólo para las empresas, sino para los propios directivos»-.
Problemas en las Inversiones
Una de las decisiones más frecuentes que tienen que tomar los directivos es dónde invertir y una mala gestión de los presupuestos puede traducirse en pérdidas económicas para la empresa y en posibles actuaciones legales y petición de responsabilidades. En España se han dado casos de gerentes de promotoras inmobiliarias que tras una mala decisión de inversión han generado grandes pérdidas a la sociedad, viéndose obligados a pagar hasta 300000€ de indemnización, costes de defensa aparte. De la misma manera, puede darse el caso de que una decisión tomada por un directivo o administrador sin consultar, como compra de maquinaria para mercados sin demanda, lleve también a reclamaciones, con las consiguientes indemnizaciones y costes legales.
Acoso y Discriminación
Las empresas son cada vez más abiertas e inclusivas, con políticas activas de igualdad en relación a género y nacionalidad, entre otras. Una demanda por un supuesto acoso laboral, del tipo que sea, puede conllevar procesos judiciales y pago de daños morales en concepto de indemnización en caso de que se determine que tal acoso no ha existido. En algunos casos ha llegado a alcanzar los 54.000€.
Mala gestión de Declaración de Concurso de acreedores
Las declaraciones de concursos de acreedores siempre incluyen situaciones delicadas que deben ser llevadas acorde a la ley. Una mala gestión de una empresa puede desembocar, por ejemplo, en la demanda de los empleados a los gerentes, responsabilizándoles de la situación y la pérdida de sus puestos de trabajo, con el consecuente juicio y gastos en la defensa, que han llegado a alcanzar en algunos casos los 150000€.
Delito Ecológico
La sostenibilidad es un factor que cada vez tienen más en cuenta tanto las empresas como los consumidores. Infringir las leyes medioambientales puede llevar a demandas, tanto de particulares como de instituciones públicas, que pueden acarrear costosos procesos judiciales que pueden alcanzar cifras superiores a 70.000€.
Los Seguros D&O, cada vez más necesarios
Los seguros D&O estaban asociados de forma tradicional a grandes empresas o a financieras, y no se contemplaban para pymes, a causa de sus altos costes y la poca utilidad que se les veía. Con el paso de los años, las sensibilidades y objetivos de las empresas también han cambiado y con ellas, las responsabilidades de sus directivos, que ahora también implican temas como la sostenibilidad, la igualdad social, la prevención de riesgos laborales y la exposición a las crisis. Fruto de ello han surgido nuevos productos especializados, ajustados al mercado de las pequeñas y medianas empresas, que han puesto de relevancia su importancia y, sobre todo, su necesidad.