La ciberseguridad cobra mayor relevancia entre empresas y particulares ahora que la ciberdelincuencia está experimentando un aumento sin precedentes
Ciberseguridad. ¿Eh? ¿Eso qué es? ¿Lo cualo? Cuántas veces habremos escuchado tales expresiones a la hora de hablar de ciberseguridad o de cualquier otra temática relacionada con la seguridad informática. Si bien no estamos hablando de un concepto muy nuevo, sí es cierto que su expansión a nivel mundial no se ha dado hasta hace relativamente poco. ¿El causante? En realidad, hay varios factores: incremento de la ciberdelincuencia, tecnología más avanzada y accesible a cualquiera, la pandemia de COVID-19… Los ciberataques son cada vez más numerosos y graves, obligando a tomar decisiones drásticas y formar alianzas para frenar su avance. No obstante, si bien estas medidas son más que necesarias y bien recibidas, para atajar el problema hay que actuar desde más abajo. La generación de hoy, la ciberseguridad del mañana.
La cuestión que muchos os estaréis haciendo es: «¿desde dónde exactamente?» Hay quien pueda pensar que bastaría con una simple formación para emprendedores privados, trabajadores de una empresa, etc. Bueno… No, hay que ir más abajo. Sí, hablamos de enseñar/formar/concienciar desde el ámbito escolar. Evidentemente, se trataría prácticamente de una utopía a corto plazo; a medio/largo plazo ya sería otra cosa. No vamos a criticar la enseñanza en España, pero que necesita una actualización está claro para todos. Más aún cuando en este país hay una demanda enorme de expertos en ciberseguridad y, por desgracia, no se puede cubrir ante la falta de ello. Tampoco vamos a buscar culpables, no creemos que sea necesario… Lo verdaderamente necesario es buscar soluciones, sobre todo ahora que llegan los esperados Fondos Europeos.
La ciberseguridad, ese gran desconocido
La pandemia de COVID-19 ha sido un mazazo destructor; se ha llevado por delante vidas humanas, sueños y empleos. La situación, aunque ha mejorado, sigue siendo precaria en muchos aspectos. Uno de ellos es la ciberseguridad. 2020 ha sido el año del «boom de la ciberdelincuencia«. Los diversos estudios realizados por empresas como Sophos o Unit 42 nos han permitido comprobar que la situación no es buena. Las grandes multinacionales, a pesar de sus beneficios, en ocasiones se las ven y se las desean para frenar los ciberataques que sufren; la situación se agrava cuando entra en juego una PYME. Por norma general, sobre todo en España, el desconocimiento de este concepto es muy elevado entre los emprendedores. Los motivos son fácilmente adivinables: falta de concienciación, de formación, de interés…
Ante esta tesitura, dar a conocer qué es la ciberseguridad se antoja primordial. El INCIBE juega un papel fundamental en ello gracias a las campañas, eventos, cursos y otras iniciativas que realiza. No obstante, es el momento de «coger al toro por los cuernos» y formar desde los Centros de Enseñanza. Independientemente de si luego se dedican a ello o no, creemos que conocer y entender qué es la ciberseguridad es clave. El saber no ocupa lugar. A España, tal y como informó la Unión Europea meses atrás, le corresponde 140.000 millones de euros; de momento, solo se han solicitado 69.500 millones. La cifra es más que suficiente para solucionar varios frentes, entre los cuales se encuentra la ciberseguridad en todos sus ámbitos: empresarial, privado, escolar… Charlas, nuevas asignaturas, talleres, cursos podrían ser medidas válidas para sentar las primeras bases. La generación de hoy, la ciberseguridad del mañana.
Emprendedor formado, PYME asegurada
Antes de correr, primero hay que aprender a caminar. Nos espera, siempre y cuando se tomen las medidas adecuadas, un largo y duro camino para que la ciberseguridad se convierta en algo cotidiano; algo que no genere sorpresa/duda cuando se hable de ello; algo que todos puedan entender, sobre todo cuando hablamos de PYMES. España es un país de PYMES. Esta afirmación es irrefutable. El 99% del tejido empresarial español está formado de pequeñas y medianas empresas, quienes generan el 65,9% de todo el empleo en nuestro país. Bares, panaderías, tiendas de ropa, etc. son mayoría absoluta en España. Proteger estos comercios es vital para que el P.I.B. español no solo no se resienta, sino también para que aumente. ¿Cómo se protegen a estas PYMES? El primero que debe estar concienciado es el empresario. Si abro un negocio, que quiero digitalizar desde un primer momento, hay que saber ciertas cosas.
La primera, y más esencial, es: Internet no es un lugar seguro. La red de redes es un arma de doble filo, y hay peligros en cualquier esquina; peligros en forma de ciberdelincuentes, ciberataques, ciberestafas, etc. Cuando uno digitaliza su negocio, debe asegurar que sus actividades están lo suficientemente protegidas, así como los posibles usuarios que hagan uso de ellas. Un ejemplo sencillo podría ser: tenemos una tienda de abalorios y vendemos tanto en físico como online. La gente que compra online deja información sensible en nuestra BB.DD. (nombre, dirección, email, número de teléfono, etc.). Todo eso requiere protección. Un emprendedor sin formación no es consciente de ello, hasta que se ve afectado por un problema grave; si el emprendedor tiene formación, el tema es diferente ya que tomará medidas desde un primer momento; será proactivo.
La necesidad de contar con un ciberseguro
Herramientas para proteger nuestro negocio hay muchas; una de ellas es el ciberseguro. Este producto, en activo desde varios años, sigue siendo un desconocido en España. No obstante, cada vez son más las aseguradoras, ante la creciente demanda, que ofrecen un ciberseguro en su catálogo. Evidentemente, se trata de un producto aún inmaduro y que necesitará tiempo para expandirse en España. En un estudio que llevamos a cabo recientemente, llamado «El Estado de los Ciberseguros en España«, sacamos en claro que la situación no es todo lo buena que debería ser. A nivel de PYMES sobre todo, muchas de ellas no eran conscientes del producto, o no lo tenían contratado. A pesar de ello, vislumbramos brotes verdes muy positivos de cara a un futuro; cercano, medio o lejano es algo que ya veremos…
En contra del ciberseguro juega que, como no pasa con el del coche, hogar o salud, no es de carácter obligatorio. Por ello, las empresas lo apartan y no lo tienen en cuenta. Claro, se deja de lado hasta que pasa lo peor y luego vamos corriendo a buscar una solución. Una solución que deshaga todo el entuerto generado por el ciberataque: robo de datos, encriptado de los equipos, pago de la extorsión, etc. Nada de esto es agradable, pero se puede evitar conociendo bien el ámbito de la ciberseguridad y el del ciberseguro. A nuestra disposición tenemos muchas formas de proteger los negocios que tanto nos cuesta levantar. Formación temprana, conocimientos básicos, concienciación y ser proactivos jugarán un papel fundamental a la hora de mantener los negocios ciber-protegidos. La generación de hoy, la ciberseguridad del mañana.