La Sanidad Publica de Baleares verá reforzada su ciberseguridad gracias a una fuerte inversión del gobierno insular.
La Sanidad Pública se ha convertido, por desgracia, en el blanco de los ciberdelincuentes gracias a los daños que puede causar y la rápida respuesta que se debe dar ante un problema así. Los ciberataques al sector sanitario se han multiplicado en época de pandemia, llegando a suponer un grave riesgo para todos. En España, hemos visto varios casos en las últimas semanas, siendo uno de ellos el que sacudió a la Sanidad Pública de Islas Baleares. Catalogado como el mayor ciberataque visto en Baleares, este movimiento afectó de extrema gravedad a 30.000 expedientes médicos personales. Entre ellos se encontraban: consentimientos informados de operaciones de tratamientos y pruebas diagnósticas a pacientes, expedientes de listas de espera y documentación administrativa. El objetivo de los ciberdelincuentes era robar y, posteriormente, encriptar toda la información para pedir un rescate al Gobierno Balear. La Sanidad Publica de Baleares verá reforzada su ciberseguridad.
A pesar de la gravedad del asunto, los perpetradores del ciberataque no consiguieron su objetivo gracias a la Subdirección de los Servicios de Tecnología de la información del IB-Salut. Su rápida actuación evitó males mayores, pero eso no se traduce en que no pueda haber otro caso en un futuro. Para evitarlo, el Gobierno de Islas Baleares ha anunciado una serie de medidas. Dicha medida no es otra que realizar una inversión de 600.000 euros para reforzar la seguridad de los servicios informáticos y de documentación del Servei de Salut. Además, para tranquilizar a los ciudadanos afectados, han anunciado que contactarán con ellos uno por uno para informar del incidente. El objetivo es cotejar los datos para comprobar que todo sigue correcto. La gravedad de la situación ocasionada semanas atrás, aunque por suerte no ocasionó daños de ningún tipo, ha obligado a tomar medidas drásticas.
