No podemos esperar que el cibercrimen disminuya, sería de inconscientes, viendo las cifras de ciberataques anuales en países como España. Es por ello por lo que la ciberseguridad dejará de ser una palabra alejada para la sociedad. 

Realmente son muchas las personas en nuestro país y en el mundo entero que no sabría definir muy bien ciberseguridad (puede que el que la RAE no ofrezca una definición de la misma, influya) pero eso está cambiando y seguirá cambiando en los próximos años. 

Y es que la ciberseguridad cada vez se está acercando más a la microempresa, a las pymes y a las familias con el esfuerzo de todos y cada uno de los profesionales de nuestro sector y tristemente también gracias a los numerosos ciberataques que se producen cada día tanto en el ámbito profesional como en el ámbito personal. 

Por otro lado, indudablemente, la situación actual de crisis sanitaria está suponiendo un importante reto para nuestros profesionales de la ciberseguridad y es que las estafas online basadas en el coronavirus y con un especial enfoque en el usuario final o nuestras familias, están siendo muchas. También un gran reto proteger infraestructuras como nuestros hospitales en estos momentos. ¿Qué pasaría si un ciberataque como el que sufrió el Hospital de Torrejón de Ardoz justo antes de que explotara el coronavirus, sucediera ahora? ¿Cómo mantener tantísimos entornos de trabajo como los derivados tras el teletrabajo, de forma segura? Son preguntas que están siendo respondidas por nuestros profesionales y no se tratan de respuestas instantáneas o al menos no debería de ser así. Se trata de preguntas indefinidas en el tiempo, tan indefinidas como son los propios ciberataques y sus orígenes en muchos casos y es por ello por lo que es fundamental una respuesta continuada en el tiempo. 

Teniendo en cuenta todo lo mencionado, la facturación de nuestro sector sigue creciendo y son muchas las expectativas para los próximos años. Prueba de estas expectativas de crecimiento en ciberseguridad para el futuro, son las numerosas compras que se han producido en los últimos meses de empresas de ciberseguridad. Podemos citar el caso de la compra de ITS Security por parte de Ibermática o bien la compra de SIA por parte de Indra. 

Pero estas compras no son las únicas evidencias, y es que cada vez existen más empresas en nuestro país que se dedican al ámbito de la ciberseguridad, más empresas finales que empiezan a contratar sus servicios que empiezan a ser vistos como necesarios, tan necesarios como el trabajar estrategias de marketing online en este contexto de vida digital. Igualmente, los servicios básicos de ciberseguridad basados en la concienciación o security awareness, empiezan a florecer en nuestro país. 

En este sentido, los profesionales de la ciberseguridad, conocen que el eslabón más débil en la cadena de seguridad de una empresa siempre es el empleado. Un empleado alejado de los ciberriesgos y que haga un uso irresponsable de la tecnología, puede convertirse en un potencial peligro. Es por ello por lo que en países como Reino Unido o EEUU los servicios de concienciación en ciberseguridad son un mantra y una línea de negocio principal en cualquier proveedor de ciberseguridad. Aquí en España, las empresas finales, sobre todo las más grandes, empiezan a entender la necesidad de una concienciación continuada en el tiempo en esta materia para sus empleados y por tanto, cada vez más proveedores la ofrecen. 

Otra gran evidencia que nos indica que estamos en un sector de futuro es sin duda la formación del talento y de los jóvenes en esta rama. Cada vez son más universidades las que han sacado un máster especializado en ciberseguridad como oferta postgrado pero no solo eso. Encontramos ya grados especializados en nuestro sector.

Estamos en un sector de futuro porque otro gran sector como el asegurador, también está apostando por la ciberseguridad. Y no solo por contratar ciberseguridad sino por ofrecer al mercado una nueva línea de negocio, los ciberseguros. Un producto que actuaría en la última línea de defensa, una vez ocurrido el ciberataque. 

Pero sin duda, lo que nos avisa de que estamos ante un sector de futuro, es precisamente el propio futuro. Lo que está por llegar. Hablábamos antes de la situación del Covid-19, una situación que ha adelantado quizás 5 años en cuanto a evolución en la forma de trabajar usando las nuevas tecnologías. Pero además del teletrabajo con diferentes herramientas y entornos digitales que suponen un gran riesgo siempre que no se aseguren y se usan de forma irresponsable, debemos tener en cuenta la cada vez más profunda digitalización de los hogares, de nuestras ciudades, de los coches autónomos que no han llegado pero llegarán…todos estos contextos deberán ir acompañados de la palabra ciberseguridad y es por ello por lo que sin duda, estamos ante un sector con un gran futuro. ¿Qué opinas?