Consejos para evitar que nuestro smartwatch sea ciberatacado y qué riesgos podemos llegar a correr si usamos estos dispositivos wearables.
El avance de la tecnología ha traído consigo la creación de toda clase de dispositivos destinados a mejorar nuestra calidad de vida. Uno de esos dispositivos es el smartwatch, o reloj inteligente. Además de dar la hora, este reloj nos permite conocer aspectos de nuestra salid como: pulsaciones, nivel de oxígeno en sangre, quema de calorías, etc. Además de estas funciones, los smartwatch pueden conectarse a internet para otras cosas, enviar y recibir mensajes vía Whatspp por ejemplo. Y aquí es donde vienen los problemas: todo dispositivo conectado a internet es susceptible de sufrir un ciberataque. Como es lógico, los smartwatch no son una excepción, especialmente si con estos dispositivos realizamos varias acciones que puedan ser objetivo de los ciberdelincuentes. A fin de cuentas, aunque sea un dispositivo menos complejo que un smartphone, sigue estando conectado a la red de alguna forma. Consejos para evitar que nuestro smartwatch sea ciberatacado.
El mercado de los smartwatch ha crecido enormemente en los últimos años, por lo que verlos a diario ya no es tan raro. Se espera que tenga un crecimiento anual del 12,5% hasta 2028, superando los 118.000 millones de dólares de facturación. Estos datos, sumado a que cada vez son más punteros a nivel tecnológico y recopilan información variada, han llamado la atención de la ciberdelincuencia. En el caso de ser víctimas de un ciberataque a este dispositivo, ¿Cuáles serían los efectos? ESET, compañía especializada en ciberseguridad, ha revelado que los datos podrían ser interceptados y manipulados; además, veríamos como nuestras contraseñas serían vulneradas y nuestros smartwatch desbloqueados. Esta situación sería especialmente grave si, por un casual perdiéramos el dispositivo. Si se diera tal situación, entonces los datos almacenados en el dispositivo caerían en malas manos; manos que podrían usarlo para beneficio propio o compartirlos con terceros.
¿Qué podemos hacer para evitar que nuestro smartwatch sea vulnerado?
Al igual que cualquier dispositivo, hay una serie de indicios que pueden dictaminar que el smartwatch ha sido una potencial víctima de ciberataque. El más evidente de todos es la batería, la cual debida al hackeo aumenta su actividad y reduce su duración. Esto es algo que pasa también en los smartphones, a lo que hay que añadir el aumento del consumo de datos móviles. Si por un casual se observa que el smartwatch se comporta de forma extraña, lo mejor que podemos hacer es ponernos en contacto con la compañía y esperar instrucciones; otra opción, teniendo en cuenta que estamos siendo víctimas de un crimen, es contactar con la policía, quien a través de una división dedicada a los cibercrímenes realizará una labor de investigación para medir los daños, buscar al culpable, etc. Hay que tener especial cautela a la hora de usar estos dispositivos IoT, y revisarlos constantemente.