La UAB aún sigue sufriendo los efectos del último ciberataque y parece que sus sistemas no recuperarán la normalidad hasta antes de Navidad.
Dos semanas han pasado desde que la Universidad Autónoma de Barcelona fuera víctima de un ciberataque (más info en este enlace). El sector de la educación, por desgracia, lleva un tiempo sufriendo los males de la ciberdelincuencia; ya hemos visto varios casos en estos últimos meses, y no parece que vayan a desaparecer. El problema de estos ciberataques no es lo que causan en el acto, sino lo que se prolonga en el tiempo. como ya hemos comentado, han pasado dos semanas desde el ciberataque a la Universidad Autónoma de Barcelona y sus efectos aún se notan. A día de hoy, el campus sigue sin conexión Wi-Fi activa, sin herramientas como el campus virtual, el portal de servicios y trámites en línea o el de bibliotecas. Y esto es solo la punta del iceberg, pues hay más. La UAB aún sigue sufriendo los efectos del último ciberataque.
Ante una situación tan grave, el rector de la universidad tuvo que dictar una resolución para suspender todos los procedimientos administrativos durante dos meses. Los servicios esenciales que usa alumnado y profesores de forma diaria está completamente caído, impidiendo así el buen desarrollo de la actividad. A esto debemos sumar el hecho de que aún estamos en pandemia. Durante las fechas más duras, las oficinas de gestión académica se vieron obligadas a gestionar las citas previas vía web; ahora, con los sistemas caídos, tienen que hacerlo vía telefónica y archivar los trámites en carpetas físicas. ¿Cuándo llegará a su fin esta situación? Las mejores previsiones dicen que antes de Navidad estará todo solucionado, es decir, en dos meses. Por desgracia, esta fecha no satisface a los más de 37.000 estudiantes y casi 4.000 docentes de la UAB. Algunos profesores ya están buscando alternativas, como usar dispositivos propios.
El sector educativo, en riesgo por culpa de los ciberataques
La situación actual invita a la precaución en todos los sectores. El crecimiento de la ciberdelincuencia es un hecho más que evidente; los ciberataques son cada vez más constantes, y su gravedad aumenta con el tiempo. Hay sectores que son muy vulnerables debido a la falta de seguridad que tienen, algo que los ciberdelincuentes aprovechan para llevar a cabo sus prácticas. El sector sanitario y el de la educación están viviendo una situación dura en la actualidad, sobre todo porque estos ciberataques no causan daño solo en el momento, sino durante mucho más tiempo. En el caso de la Universidad Autónoma de Barcelona estamos hablando, como mínimo, de dos meses de inactividad. Durante esos dos meses, los estudiantes/profesores tendrán que realizar clases más cortas para adaptarse a las limitaciones, o incluso tener que cancelarlas por no poder acceder a servicios concretos. Seguiremos pendientes para ver cómo evoluciona el caso.
