Con el auge sobre todo de las redes sociales, hemos creado una vida paralela a la real: nuestra vida social. En ella, las amenazas, los insultos y los problemas, se originan de una forma mucho más sencilla y rápida que en la vida real.
Tristemente, palabras como ciberacoso, cyberbullying o grooming suenan cada vez más en la sociedad. Por ejemplo, si en el llamado «mundo real» nos encontramos en un grupo donde hay varia gente a la que no conocemos y con diferentes ideologías políticas, seguramente el debate estará basado en el respeto y en el turno de palabra. Si trasladamos esta misma situación a nuestro «mundo social» y nos encontramos por ejemplo en un grupo de Facebook, WhatsApp, o inlcuso en un debate en Twitter…este mismo debate seguro y muy probablemente no estará basado en el respeto. El hecho de estar separados físicamente del resto de personas, de saber que no nos están viendo (incluso no nos conocen si usamos cuentas falsas), aumenta mucho más las posibilidades de perder el respecto y comenzar los insultos. Comienza aquí el ciberacoso. Este es uno de los muchos ejemplos que se dan hoy día pero…¿sabemos lo que es el cibercoso? ¿Es lo mismo que el cyberbullying?
La diferencia clave entre el ciberacoso y el cyberbullying
Aunque los hechos pueden ser similares, hablamos de insultos, amenazas, acosos, humillaciones, chantajes…etc. existe una importante diferencia. El cyberbullying se produce exclusivamente entre menores de edad. Cuando estos hechos se llevan a cabo entre adultos, es lo que denominamos ciberacoso. Y todo ello, en Internet.
De hecho, un informe de la OMS ponía a España entre los países con mayor incidencia de insultos y amenazas a los menores a través de Internet, WhatsApp o las redes sociales. Es especialmente preocupante el creciente número de casos entre adolescentes según publica el diario WebConsultas. Por ejemplo en España, casi un tercio de los menores de 17 años afirma haber sufrido cyberbullying, e incluso el 19% reconoce haber insultado en la red, mientras que cerca de un 6% confiesa haber sufrido acoso en las redes sociales alguna vez, según un informe de Save the Children.
Ahora bien, existen otros muchos casos en los que el acosador es un joven o un adulto (mayor de edad) e involucra a una víctima menor de edad. Esta otra situación se reconoce bajo el término inglés de Grooming. Un proceso mediante el cual, el pederasta intenta crear un vínculo emocional con el menor a través de Internet con el objetivo de ganarse su confianza y poder abusar sexualmente de el posteriormente.
¿Cómo prevenir el ciberacoso, cyberbullying o Grooming?
Algunas medidas básicas como por ejemplo no entrar en insultos fáciles a través de las redes sociales (si respetas, más fácil serás respetado), monitorizar tus dispositivos para evitar que cualquier otro usuario acceda, no compartir contraseñas, hablar con nuestros hijos para tratar de detectar si puede haber algún tipo de cyberbullying, no compartir con nadie ni mantener en nuestros dispositivos ninguna fotografía o vídeo de carácter privado que pueda llegar a perjudicarnos si un tercero las publica sin nuestro consentimiento…etc.